Naturaleza irregular
Covarrubias en su “Tesoro” dice: Monstro es cualquier parto contra la regla y orden natural, como nacer el hombre con dos cabeças, quatro brazos, y quatro piernas; como aconteció en el condado de Urgel, en un lugar dicho Cerbera, el año 1343, que nació un niño con dos cabeças, y quatro pies. Los padres y los demás que estavan presentes a su nacimiento, pensando supersticiosamente pronosticar algún gran mal, y que con su muerte se evitaría le enterraron vivo. Sus padres fueron castigados como parricidas, y los demás con ellos.
Isabel Balza en “Tras los monstruos de la biopolítica” dice que “Las interpretaciones de la naturaleza como normativa producen un concepto de monstruo negativo, mientras que las explicaciones de la naturaleza que abogan por su variedad y multiplicidad hacen posible un concepto afirmativo de la monstruosidad.”
El filósofo Michel Foucault, en su libro Los Anormales (1974-1975), señala que “el monstruo es, en cierto modo, la forma espontánea, la forma brutal, pero, por consiguiente, la forma natural de la contranaturaleza. Es el modelo en aumento, la forma desplegada por los juegos de la naturaleza en todas las pequeñas irregularidades posibles. Foucault afirma que el monstruo se erige como «principio de inteligibilidad de todas las formas de la anomalía» (Foucault 2001: 58), pero que nunca podremos definir el monstruo como tal.
En L’Animal que donc je suis (2006) Jacques Derrida explora la fragilidad de las supuestas fronteras entre lo animal y lo humano. Plantea que tanto la animalidad como la monstruosidad son dispositivos de alterización y marginalización de determinados colectivos.
En “De la Gramatología” anuncia: «El porvenir sólo puede anticiparse bajo la forma del peligro absoluto. Rompe absolutamente con la normalidad constituida y, por lo tanto, no puede anunciarse, presentarse, sino bajo el aspecto de la monstruosidad“.