Con motivo del XV Congreso de la Sociedad española de Emblemática, que se celebra en Valladolid a comienzos del mes de noviembre de 2025, se organiza una exposición con los fondos de la biblioteca histórica de la Universidad de Valladolid, de interés para los especialistas en la literatura emblemática y de la cultura visual. Con el título de «Qvod non vides», utilizado en una de las empresas de la custodia de Juan de Arfe para la catedral de Valladolid, se juega con el significado de la influencia causada por la literatura emblemática en el aprendizaje y los recuerdos, al tiempo que se ponen en relieve los fondos de carácter emblemático y de sus aplicaciones de la biblioteca Histórica de la Universidad de Valladolid. Emblemática y...

Universidad de Valladolid. Biblioteca histórica

Editado por: Curador 01

Emblemática y paraemblemática

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3.10. Haeften: Escuela del corazon, instruccion para que el corazon averso se convierta a Dios (1720)

Título: Escuela del corazon : instruccion para que el corazon averso se convierta a Dios
Fecha: 1720
Editorial / Editor: En Madrid : en la Imprenta Real, por Joseph Rodriguez de Escobar
Signatura: U/Bc BU 05538
Formato(s): Libro o monografía

A lo largo del siglo XVII surgirán varios libros que incitan a la meditación y a la oración privada, recurriendo, en muchos casos, al uso de imágenes. Como una de las obras más significativas de esta corriente, podríamos señalar la Schola Cordis, del benedictino Benedictus van Haeften (1588-1648). Este monje fue originario de Utrecht, donde había nacido en 1588 y, en su juventud, profesó en el monasterio de Affligem. Allí dedicará su vida al estudio y alcanzará el puesto de prior mayor en 1618, que mantendrá hasta su fallecimiento en 1648. Va a ser conocido por sus libros sobre las costumbres en los monasterios benedictinos, como el Propugnacubium reformationis monasticae Ordinis S. Benedicti o las Disquisitiones monasticae, pero las obras que lo harán verdaderamente reconocido son la Schola Cordis (Amberes, 1623) y la Regia Via Crucis (Amberes, 1635).

Enfocándonos en la Schola Cordis, tendrá varias ediciones en distintas lenguas europeas, siendo traducido al castellano por el benedictino fray Diego de Mecolaeta en 1720 bajo el título Escuela del corazón: instrucción para que el corazón averso se convierta a Dios, con sucesivas ediciones en 1748, 1791 y 1864. En la Biblioteca de la Universidad de Valladolid se conserva un ejemplar de la edición princeps de la traducción castellana, impresa en Madrid en 1720, pero no se conserva completo, sino que el volumen corresponde únicamente a la segunda parte.

Van Haeften ofrece al lector un libro organizado en cuatro partes divididas en lecciones, siguiendo la idea de escuela que anuncia su título. El primer libro actuará como introducción y, en los libros segundo y tercero, al igual que sucede en otras recopilaciones de emblemas de la época, como el Pia desideria (1624), hará un recorrido por las vías que debe seguir el cristiano para alcanzar a Dios. Se explica cómo, en una primera etapa, el corazón humano se apartará de Cristo, hasta que finalmente se arrepienta y vea necesario limpiar sus faltas. Posteriormente, se accede a la vía iluminativa, en la que el Amor Divino y la psique se unirán para alcanzar el punto de mayor perfección que, en última instancia, llevará a la unión con la divinidad. En el cuarto libro, titulado Exercicios del corazón en la Pasión de Cristo, el autor incide en la importancia que tiene para el alma del cristiano la meditación sobre la Pasión. La mayor parte de sus emblemas estarán protagonizados por el corazón, acompañado del Amor Divino (inmortalizado como niño alado) y del alma (una figura juvenil), viendo una clara relación con los grabados del Pia desideria de Hugo o del Amoris divini emblemata de Vaenius. Entre todas las imágenes recopiladas, podríamos incidir sobre los emblemas XXIV al XXVII, que nos presentan un ciclo muy interesante: en el primero, el alma sale arando su corazón para “romper” su dureza. En los dos siguientes, el Amor Divino siembra y riega las semillas que, en el último, florecerán en forma de azucenas. A partir de esta serie se explica que, tras ablandar su corazón, el ser humano estará dispuesto a recibir la palabra de Dios y hacerla brotar en su interior.

Sabemos que este libro de emblemas contó con una gran difusión en el siglo XVIII. Se hallaba en la biblioteca de artistas como el arquitecto Francisco Alejo de Araguren, además de servir de inspiración para completos programas iconográficos, como el preservado en el cancel del Santuario de Jesús Nazareno de Atotonilco (México), en el que se pintaron 42 de los 55 emblemas de van Haeften.

Bibliografía

Azanza López, José Javier (2003): “Alegoría, emblemática y doctrina cristiana en un convento de clausura aragonés del siglo XVII: un programa pictórico inspirado en la Regia Via Crucis de Benedictus van Haeften”, Archivo Español de Arte, nº 302, pp. 133-152.

Escalera Pérez, Reyes (2017): “Schola cordis y su impronta en el cancel del santuario de Jesús Nazareno de Atotonilco (México)”, Quiroga, nº 11, pp. 12-28.

Ferreira Fernández, Myriam (2018): “La biblioteca del arquitecto Francisco Alejo de Aranguren (1739-1785)”, BSAA arte, nº 84, pp. 329-351.

Lucas Rodríguez Fernández