
La página se divide en dos partes. En medio la tierra y el mar que se desborda por el margen. En su parte superior se desarrolla la escena en la que un ángel que sale del interior de una nube entrega a Juan un libro, para que lo coma y profetice a los pueblos. Y otro ángel le entrega una vara para medir. En la parte inferior San Juan mide el templo con la vara. Sorprenden las coloridas tejas árabes del techo del templo y el arco en forma de herradura que da paso al altar. Arriba en verde las ventanas del testero; a los lados las ventanas de la nave en azul. En las naves laterales, los personajes se disponen, en un mismo plano, tratando de presentar diferentes perspectivas.
1.Después me entregaron una vara de medir, diciéndome: «Vete, mide el Templo de Dios y el altar, y haz el censo de los que vienen a adorar. No midas el patio exterior ni lo tomes en cuenta, pues ha sido entregado a los paganos, quienes pisotearán la Ciudad Santa durante cuarenta y dos meses. (Apocalipsis 11, 1-2)